Según datos de la Unión Europea se necesitan cubrir actualmente casi 1 millón de vacantes de empleo para programadores y sólo 4 de cada 10 empresas lo consigue.
En este momento, miles de empresas en todo el mundo están atrapadas buscando programadores porque necesitan escalar rápidamente su negocio.
Por otro lado estudios como los de Curtis (1981), Mills (1983) y más recientemente Boehm (2000) sugieren que existen varias órdenes de magnitud entre un programador promedio y el mejor programador de una empresa.
Encontraron que el ratio de diferencia entre los mejores y los peores era de 20 a 1 en el código inicial, de 25 a 1 en la depuración, 5 a 1 en la optimización del tamaño del programa y 10 a 1 en la velocidad de ejecución.
Estos datos sugieren un nuevo paradigma. Ya no es necesario que compitas contra el resto de empresas en la caza del mejor talento para hacer crecer tu negocio.
Invertir tus recursos para transformar a tus programadores en trabajadores altamente cualificados es más óptimo.